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lunes, 5 de febrero de 2024
viernes, 2 de febrero de 2024
UN DESAFORTUNADO CARTEL PARA LA SEMANA SANTA SEVILLANA
Las fiestas que identifican al
colectivo vecinal de un municipio no son de los políticos, ni de los
presidentes de un Consejo o Asociación o Agrupación de Cofradías, ellos pueden
organizarlas, si, pero son de la ciudad y a la ciudad deben el máximo respeto
en sus creencias y en su forma de vivir sus celebraciones. ¿Que el cartel iba a
hacer saltar las críticas de los sevillanos? Eso ya lo sabia el presidente del
Consejo Cofrade y seguro que se frota las manos por la polémica. No hay nada
como una buena polémica para reservarse el protagonismo de un hito, en este
caso desafortunado, en la historia de las Hermandades y Cofradías de Sevilla.
El cartel pasara a la historia, si, pero no será por lo que en ningún caso
debería representar.
Las opiniones han sido
variopintas y dispares, y algún colega del pintor, falto de información llega a
afirmar a propósito de las opiniones sobre que el modelo parece afeminado, que
hasta el mismo Papa Francisco ha bendecido las uniones homosexuales para
justificarlo, lo que demuestra una supina ignorancia, ya que el Papa Francisco
no a bendecido tales uniones. Lo que Francisco ha dicho es que se puede
impartir la bendición a los homosexuales como hijos de Dios que son igualmente,
pero no a las uniones. A ver si comprendemos bien al leer e interpretar.
Se ha comentado que por
manifestarse opiniones sobre la apariencia afeminada del modelo se está cayendo
en la homofobia, lo que viene a demostrar que, una vez más, todo lo que no sea
opinión favorable es homofobia o machismo o racismo. Existe la libertad de
opinión y expresión y su límite acaba donde empieza la opinión del otro, por lo
que tan válida es la opinión del uno como la del otro, todo desde el respeto.
El sentimiento antireligioso por convicción atea particular, no justifica un
ataque continuo a las creencias y a las manifestaciones de esas creencias.
A algunos les parecerá que los
que viven la Semana Santa intensamente expresado en sus formas y sus
características peculiares y particulares de cada lugar, es algo caduco, de
tiempos pasados, rancio, idólatra, etc., pero no entienden que para muchas
personas es su forma de creer en la divinidad, a través de sus manifestaciones
icónicas, sus imágenes, sus escenas de la pasión y, por tanto, se le debe el
máximo respeto. No soy yo uno de ellos, aún siendo teólogo, pero si lo he
percibido como sevillano toda mi vida, y se lo que he visto y lo que se siente.
El sevillano y la sevillana de a pie quiere vivir su Semana Santa y que nadie
pseudoinnovador venga a meter la mano. Que no le toquen su Semana Santa, y como
ciudadano de Sevilla tiene todo el derecho a manifestarse en contra de un
cartel que ni lo percibe como símbolo de su semana de pasión, ni representativo
de ella. ¿Lícitas las opiniones contrarias? Por su puesto, pero no por ello
harán cambiar la opinión del sevillano y del sevillano “capillita” como algún
escritor así los llama.
Sevilla es Semana Santa y Feria
de abril, al igual que Badajoz es Carnaval y también Semana Santa, y en ellas
se identifican sus ciudadanos, son sus manifestaciones culturales y religiosas,
y a ellos se les debe un respeto en la representación de su sentir y vivir sus
fiestas, y los que tienen la autoridad para ello, deben garantizar ese respeto.
Un triste cartel para la historia
de la Semana Santa de Sevilla que lo único que ha conseguido es levantar
quejas, polémicas, debates, pero, en ningún caso, digan lo que digan las
opiniones contrarias, representa en absoluto a la Semana Santa sevillana. Un
cartel para el olvido, sin lugar a dudas.
https://www.extremadura7dias.com/reportaje/opinion-un-desafortunado-cartel-de-semana-santa